El sillón rojo llegó a mi un día de febrero. Lo trajeron a cuestas dos hombres que ya no están en mi vida. Desde el verano se ha quedado recargado al lado de la puerta de mi antigua casa en Holanda. Sus brazos regordetes no cabían por las escaleras, incluso después de rompererle los pies. Ahí lo dejé y no creo volverlo a ver. Ahora, escribo en su nombre.

Escribo cada domingo. Escribo por costumbre, por las cosas pequeñitas y las grandes. Por el sol que sale en las mañanas y una nueva vida en Madrid. Escribo un poco para mi y un poco para ti.

I used to translate some things into English, but it became too much. If you don’t speak Spanish but are curious to read, I invite you to copy and paste it into google translate. Let’s see what happens! It’s part of the game.

Un beso,

Montserrat Amargo.


Si quieres saber más de mí.

Website

Instagram


Subscribe to Stories from the red couch

Writings about my travels, thoughts on the mundane, and reflections on my Art practice.

People

Visual artist and writer.